Como me he reído con el vídeo de «La puerca de Milà» que ha creado un internauta anónimo cuando ya se están preparando los castings para Gran Hermano en su décima edición.
Y por si no habéis seguido bien la letra, os la pego a continuación:
«Acompaño a por mi sombra por la avenida, mis pasos se pierden entre tanta gente, busco una puerta, una salida donde convivan pasado y presente.
De pronto me paro, alguien me observa, levanto la vista y me encuentro con ella y ahí está, ahí está…
Ahí está, ahí está, parece un esperpento, la puerca de Milá.
Ja, ja, ja… El Gran hermano va por el 10 y como siempre será diferente, todo cambiará menos servidora, su fiel presentadora, que tanto lucha, por mearse en la ducha. Ahí, está, ¿pero esto que es?, La puerca de Milá, me estáis volviendo loca con el pinganillo ¿eh?
Ahí está, ahí está, meándose en la ducha, la puerca de Milá, ¡ya está bien de hipocresias!
Sé que berrean algunos pelmazos que el Gran Hermano ya es un coñazo, pero mis peinados suben la audiencia y no tengo competencia en ser rabalera ni en estilismo hortera…. Ahí está, ahí está…
Cállate que estoy hablando yo, si no te callas te echo del plató, me cago en la mar… Ahí está, ahí está cagandose en la mar, la puerca de Milá
Sigo teniendo problemas con el pinganillo ¿sabes qué? me lo quito y a ‘tomar por culo’ y también me quito los tacones que me están jodiendo, porque aquí yo hago lo que me da la gana, y como me entere de que fumas te corto la cabeza. Me estoy quedando afónica…»